El día de la Mujer no se felicita, no se celebra.

Más allá, si se está en sintonía y se participa de la lucha en causas sociales, en orden a la coherencia, nos detenemos unos minutos para recordar que el 8M no nace para celebrar a la mujer por ser madre, por ser amiga o por su condición de objeto, como atractiva. ¿Qué hacemos entonces? ¡Comprender la historia!
En el Día de la Mujer no se felicita sino que se recuerda, se respeta y no se juzga a las mujeres que piensan diferente.
La Asociación de Docentes de la Universidad Nacional de Misiones (ADUNaM) como organización en la que laboramos a diario con mujeres, codo a codo con ellas; aprovechamos la jornada para expresar nuestro compromiso en la integración de la perspectiva de género en nuestras acciones cotidianas desde hoy y a futuro.
Lo hacemos desde el convencimiento y en el reconocimiento de las necesidades más profundas de construir una sociedad más justa e igualitaria, inclusiva en el aspecto más amplio de la palabra.
Y es de esta manera que invitamos a cada persona con quien tenemos la posibilidad de construir un hacer, a integrar esta modalidad, esta mirada, este compromiso hacia una acción cada día más abierta, más inclusiva, más enamorada de la vivencia de una realidad inapelable: somos iguales y desde esta igualdad todos pertenecemos.
Conmemoramos este 8 de marzo, “Día de la Mujer” rememorando la lucha de las mujeres por el reconocimiento y ejercicio efectivo de sus derechos, que tiene como antecedente histórico: la declaración del Día Internacional de la Mujer Trabajadora, que realizó en 1910 durante la Conferencia Internacional de Mujeres Socialistas.
Es necesario reflexionar sobre lo alcanzado, pero necesario también colaborar en lo mucho que aún queda pendiente para alcanzar: ¡la igualdad real entre mujeres y hombres!